Yucatán es uno de los 31 estados que, junto con el Distrito Federal, conforman las 32 entidades federativas de México. El estado se localiza en el sureste de México y en el norte de la península de Yucatán. Se encuentra limitado al norte por el Golfo de México, al sureste por el estado de Quintana Roo y al suroeste por el estado de Campeche.
Yucatán es un estado muy diferente al resto del país, su historia, cultura, clima, opciones de entretenimiento y deporte, economía e infraestructura lo hacen uno de los mejores y más seguros lugares para vivir en el país. Desde la ciudad amurallada de Campeche al Oeste de la península, hasta el hermoso caribe mexicano al este, en el estado de Quintana Roo, la península de Yucatán ofrece desde un modo de vida pleno, relajado y tranquilo hasta una vida de diversión, playa, música y deportes extremos.
La historia de la región es vasta, interesante y maravillosa, desde los mayas, la conquista y hasta nuestros días. Fueron los mayas quienes establecieron los primeros poblamientos en el territorio de la Península, aunque la presencia de los primeros humanos en el espacio geográfico data de finales del pleistoceno, como parecen indicar los hallazgos en las cavernas de la costa oriental de la península y en las grutas de Loltún.
Antes de la llegada de los españoles a la península de Yucatán, el nombre de esta región era el Mayab. En lengua maya, ma' ya'ab se traduce como unos pocos. Fue una región muy importante para la civilización maya, la cual alcanzó la cumbre de su desarrollo en este lugar, particularmente durante el denominado período posclásico, aunque los asentamientos mayas más remotos en la región se estiman hacia el siglo III d. C. Cuando las primeras migraciones provenientes del Petén se establecieron primero en la región de Bacalar. Hacia el siglo V, los pobladores empezaron a trasladarse hacia el poniente de la península, fundando entre otras ciudades Chichén Itzá, Izamal, Motul, Ek Balam e Ichcaanzihóo (también llamada T'Hó), actualmente Mérida, la capital del estado actual.
Las ciudades mayas de la zona continuaron existiendo después del colapso de las ciudades de la región maya original y algunas de ellas seguían siendo habitadas a la llegada de los españoles a principios del siglo XVI.
En la actualidad, se conservan en extraordinario estado un gran número de sitios arqueológicos que abarcan diversos períodos del desarrollo de la civilización maya como Chichen Itzá, Uxmal, Dzibilchaltún y Tulúm, entre otras, y es posible visitarlas durante todo el año, los sitios cuentan con guías de grupo y privado, alojamiento cercano, restaurantes y tiendas de artesanías.
Agroindustria henequenera
El Agave fourcroydes, comúnmente conocido como Henequén en Yucatán, Sisal en otros lugares, Ki en lengua Maya. Casi en paralelo con la guerra de castas, se desarrolló desde mediados del siglo XIX una potente agroindustria henequenera que dio sustento a la autonomía económica y al aislamiento de Yucatán. La planta del henequén o sisal y la fibra o sosquil (maya: sos kí) que de ella se obtiene fueron la base de una sólida y dinámica economía que apuntaló el desarrollo económico del estado, aunque desgraciadamente no así su desarrollo social. Los productos derivados del henequén: járcias, cuerdas, costales tapetes, recubrimientos y otros muchos, se convirtieron en artículos de exportación de la península yucateca que trajeron las divisas y los recursos requeridos para financiar el crecimiento del estado.
El Estado de Yucatán y la región en su conjunto tuvieron un notable crecimiento a lo largo de los últimos años del siglo XIX gracias esencialmente a a industria henequenera, aunque con base en la explotación de los indígenas mayas. Cientos de haciendas contribuyeron a la prosperidad de la región, aunque principalmente a la de sus dueños —que no al trabajador de origen maya que la hizo posible con su esfuerzo— hasta que la llegada de los productos sintéticos después de la segunda guerra mundial, y la extensión del cultivo del henequén a otros lugares del mundo, propiciaron su paulatino declive.
La situación de bonanza que se vivió permitió que la ciudad de Mérida tuviese alumbrado público eléctrico y tranvías antes que la Ciudad de México. A principios del siglo XX, Mérida contaba con el mayor número de millonarios per cápita que en cualquier otra parte de América Latina. Hasta la fecha el Paseo de Montejo, avenida inspirada en los bulevares parisinos, está llena de casas lujosas de la época. Esto se daba mientras en los pueblos al interior del estado de Yucatán y una gran parte de la población carecía de lo estricto.
Hasta mediados del siglo XX, el contacto que tenía Yucatán en su condición de península -casi isla- con el el resto de México era por vía marítima. El comercio con los Estados Unidos y Cuba, al igual que con Europa y otras islas del mar Caribe eran más significativos que con México.
En los años 30 se tuvo contacto vía aérea por medio de hidroaviones que despegaban de la ciénega del Puerto de Progreso, rumbo a La Habana, Cuba y la Florida en los Estados Unidos, en la década siguiente con la inauguración de la terminal aérea se pudo enlazar con la Ciudad de México, a través de la entonces Compañía Mexicana de Aviación.
Es hasta 1951 cuando Yucatán fue unido por ferrocarril al resto del país y aún así, con incompatibilidad de vías férreas, ya que del sur de Veracruz hasta la península prevaleció todavía algunos años el sistema de vía angosta, a diferencia de la vía ancha que existía de Veracruz hacia el altiplano. Después, hasta los años 80, vendría la carretera que uniría finalmente el altiplano con la Península de Yucatán
En la última década del siglo XX se condujo exitosamente un proceso de reordenación económica y social que le ha permitido a la entidad salir de la dependencia henequenera que ya había agotado su capacidad para ser el eje fundamental del desarrollo económico.
La región es rica en cultura y tradiciones, desde la gastronomía hasta la danza y la música. Además, ofrece una gran variedad de opciones de entretenimiento para todos los gustos y edades.
La gastronomía yucateca tiene un sabor diferente a la del resto de México y ha sido clasificada de tener una de las gastronomías más completas.Los condimentos son un fundamento característico, el agua de la región también influye y desde luego los ingredientes mismos son determinantes en el gusto de los platillos de Yucatán. Estos tienen influencia de la cocina original maya, sobre todo el vínculo con el maíz que fue la base de la alimentación del pueblo maya. Aunque también existen otras influencias en la cocina de Yucatán, los estilos del Caribe, de México —sobre todo la cocina poblana y veracruzana, de Europa y, más recientemente, de la cultura del Medio Oriente.
El hombre utiliza la guayabera, prenda de vestir originaria de Cuba. En ocasiones festivas se usa un pantalón blanco y la filipina, también blanca. La filipina es una variante de la guayabera, blanca, de manga larga y cuello alto; se le considera la prenda típica del mestizo yucateco. Las mujeres utilizan el huipil, también denominado hipil, como traje típico. Una versión más elaborada del hipil es el terno, el cual es utilizado en ocasiones especiales y denota elegancia.Se complementa el atuendo con un rebozo y con zapatos blancos. El peinado de las mujeres es recogido en forma de chongo; se colocan unas flores del lado derecho para las mujeres casadas y del izquierdo para las solteras.
En lo que respecta a la música, la trova yucateca es uno de los principales géneros musicales en Yucatán que surgió en las primeras décadas del siglo XX. La jarana yucateca es un género musical que algunos consideran adaptación local del fandango y a la jota aragonesa, introducida durante la época colonial,que se ha bailado por generaciones en las fiestas populares llamadas vaquerías. Yucatán cuenta con una de las mejores orquestas sinfónicas de México.
Existen diversas opciones de entretenimiento en la ciudad y la región. La ciudad de Mérida cuenta con múltiples salas de cine, regulares y de lujo, bares, restaurantes y centros nocturnos. Otras opciones de entretenimiento son el teatro; de los cuales se puede escoger entre obras de teatro regional, que usualmente son con tinte chusco y picaresco y producciones nacionales que ofrecen funciones por temporadas en los teatros de la ciudad, usualmente el teatro Peón Contreras o el teatro Armando Manzanero (antes teatro Mérida). Entre las opciones para los gustos más refinados se encuentran las funciones de la Orquesta Sinfónica de Yucatán y La Opera en el Teatro Peón Contreras que tienen producciones de la más alta calidad en el país y regularmente cuentan con la presencia de músicos invitados de renombre internacional.
La pintura es una de las artes más antiguas de México y de Yucatán. En el período prehispánico está presente en edificios, códices, cerámica, atuendos. En la península yucateca la región donde se encuentra la mayor concentración de pinturas mayas, es particularmente en la zona Puuc. La pictografía de la cueva de Loltún es las más antiguas de la región aunque existen dudas de si fuera el pueblo maya el autor de estas pinturas rupestres. Yucatán tiene también, bibliotecas, teatros, salas de arte y de exposición, museos de toda índole y muy particularmente una galería de arte contemporáneo llamada Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán (MACAY), en la que se presenta obra de los más connotados artistas locales y foráneos. Como parte del patrimonio cultural yucateco, se encuentra la obra pictórica de Fernando Castro Pacheco, cuyos murales transportables cubren las paredes del Palacio de Gobierno y muy particularmente de su Salón de la Historia, ubicado en la Plaza Grande de Mérida, ciudad capital. La obra de este reconocido artista plástico está también expuesta permanentemente en el Museo de Arte Contemporáneo citado arriba.
En la península de Yucatán existe un sinfín de opciones para realizar deportes de todo tipo, ya sea por esparcimiento, salud o de manera competitiva. La región cuenta con clubes privados deportivos y centros deportivos públicos de libre acceso.
Entre las opciones de deporte para realizar en la región se encuentran el fútbol, basquetból, tenis, béisbol, softtbol, squash, golf, ciclismo, natación, fútbol americano, box, artes marciales, Yoga, canotaje, pesca deportiva, deportes de vela buceo, entre otros.
La región cuenta con una economía estable que le ha permitido un crecimiento constante. Entre las principales actividades económicas se encuentra el turismo, la construcción, textil y la industria agropecuaria.
Habiéndose dejado atrás la severa dependencia que tuvo la economía del estado de Yucatán en la actividad henequenera, hoy la entidad dispone de una economía mucho más diversificada.
El esfuerzo inicial de la industrialización por medio de las maquiladoras no tuvo el éxito esperado como producto de la crisis internacional y de la falta de competitividad de la región en ese rubro con relación a otros países y regiones de México. Sin embargo, en la actualidad el estado de Yucatán es una de las regiones de mayor prosperidad relativa en el sureste mexicano. La economía estatal se basa en el turismo, la actividad agropecuaria, la pesca y el comercio. La importancia del turismo ha aumentado notablemente después de que Yucatán ha quedado vinculado e integrado al destino internacional del Caribe maya en la costa oriental de la península.
Del mismo modo, el patrimonio arqueológico regional, muy rico y abundante, es un importante punto de apoyo para la actividad turística y la economía en lo general. Se ha modernizado la infraestructura carretera de la península, y los avances al respecto son notorios ya que cuenta con una red de caminos actualizada y completa que comunica prácticamente todas las comunidades del estado. Se cuenta también con un puerto comercial en Progreso cuyo muelle, al internarse en el mar más de seis kilómetros, permite operaciones de intercambio comercial marítimo que se han ido incrementando en los años recientes.
El clima de la península es un clima cálido la mayor parte del año, ideal para personas mayores o para quienes desean escapar de climas más fríos y secos. El clima es ideal para utilizar ropa de algodón, de manga corta, bermudas y sandalias durante casi todo el año.
El clima en Yucatán es uno de los más cálidos en México; esto se debe a la ubicación geográfica (se encuentra al sur del Trópico de Cáncer) y la escasa altitud del estado. Las altas temperaturas, sumadas a la precipitación anual (con su mayor intensidad en verano), dan como resultado un dominio mayoritario del clima cálido subhúmedo con aproximadamente el 85% del territorio total del estado donde la temperatura media anual es de 24°C a 28 °C.
La península cuenta con una importante infraestructura educativa y muy particularmente en el nivel universitario y superior. La Universidad Autónoma de Yucatán en el estado de Yucatán, junto con una treintena de universidades y de instituciones educativas privadas de nivel superior conforman el eje sobre el que gira la oferta educativa de la región.
La red carretera de Yucatán es de 6.120 km, de los cuales 5.846 km son de dos carriles y 274 km son de cuatro carriles. Las autopistas de cuota alcanzan 154 km. La carretera Mérida-Progreso, es un tramo del sistema carretero de gran importancia ya que conecta la capital estatal con el puerto más importante del estado y propiamente remata en el denominado Puerto de Altura, pieza clave de la infraestructura estatal que permite la operación marítima comercial y turística que da aliento a la economía de Yucatán.
La red carretera se conecta con la de los otros estados de la Península de Yucatán. Además, la ciudad de Mérida cuenta con un periférico, consistente en una moderna vía rápida de 6 carriles que permite rodear la ciudad capital e interconectar las salidas hacia otros puntos de la península de Yucatán.
Yucatán cuenta con dos aeropuertos internacionales: Uno en la ciudad de Mérida y otro en el municipio de Kaua, a unos cuantos kilómetros de Chichén Itzá. El principal es el aeropuerto internacional de la Ciudad de Mérida (con el código IATA: MID). Este aeropuerto que sirve a más de un millón de pasajeros por año y es el segundo más importante en la región sureste de México, después del aeropuerto de Cancún en el estado de Quintana Roo, cuenta con una capacidad de pista para 30 operaciones por hora y con el suficiente largo para permitir la operación de aviones como el Boeing 747 y el Boeing 777.
El aeropuerto Internacional de la Ciudad de Cancún (con el código IATA: CUN) es el aeropuerto con mayores operaciones en la región y el segundo del país, después del de la ciudad de México, cuenta con vuelos directos internacionales a ciudades como Miami, Huston, Atlanta, Nueva York, Boston, Los Angeles, París, Londres, Madrid, Sao Paulo, Río de Janeiro, Berlín, Montreal, entre otros..